El jacarandá del patio atardeciendo en la casa de Martha

Los perros jugando a las escondidas detrás de los ladrillos 

La calle de tierra y los jubilados en bicicleta

Y el olor a polvo con laguna de Chascomus 

La jauría de la cuadra, los perros reos 

Esos perros que asustan a los turistas 

Esos que se acercan tímidos con una ramita 

Piensan que con eso calmaran la noble voracidad de Chicha

Las calles de Chascomus ya las siento extrañas 

Se perdió la magia que tenia hace unos años  

Las puestas de sol en bicicleta ya no son iguales 

Mucho menos tomar café en el parador de la costanera

Ya ni recuerdo cuando fui con Malen a meterme en la laguna